Seguimos aquí, seguimos con una alimentación basada en plantas: Por qué importa el Mes Mundial del Veganismo
Cada año, el 1 de noviembre marca El Día Mundial del Veganismo da inicio a una invitación de un mes de duración para reflexionar sobre lo que realmente significa el veganismo: para nuestra salud, para los animales, para el planeta y para los demás. Para nosotros en Vegaliano , el Mes Mundial del Veganismo, nunca es solo una campaña. Es un momento de pausa. Un espacio en el año en el que nos detenemos y nos preguntamos: ¿cómo llegamos hasta aquí y hacia dónde vamos?
Este año, más que nunca, esa reflexión se siente necesaria.
En los últimos 12 meses, la industria vegana ha experimentado una contracción significativa. Segmentos que antes crecían rápidamente en el comercio minorista y la hostelería se han ralentizado. En Europa y Norteamérica, numerosos restaurantes veganos —incluso algunos con larga trayectoria— han anunciado su cierre, alegando el aumento de los costes, la disminución de la clientela y márgenes insostenibles. Marcas de productos de origen vegetal que en su día prometían mucho han reducido sus operaciones, se han reinventado o han sido adquiridas por grandes conglomerados, solo para ver cómo sus misiones originales se diluían o sus productos se dejaban de fabricar. Informes de medios como FoodNavigator , Noticias sobre productos de origen vegetal y El Guardián Durante 2024 y 2025 se ha constatado una disminución del espacio destinado a productos veganos en los estantes de los supermercados convencionales. El mensaje que se repite es claro: «el veganismo ya no es tendencia».
Pero cuando algo tan profundamente impulsado por valores se presenta como una tendencia, su aparente declive dice más sobre los ciclos de consumo que sobre la importancia del movimiento en sí.
La realidad es más compleja. Si bien el interés del consumidor ha cambiado, no es porque las razones para hacerse vegano hayan perdido fuerza, sino porque la industria se enfrenta a los problemas propios de un movimiento en maduración. Tras una década de rápida expansión y fuerte inversión, sobre todo entre 2019 y 2022, la industria lidia con desafíos estructurales más profundos. La presión del coste de la vida ha convertido el precio en una preocupación clave para los compradores, y muchos productos de origen vegetal siguen siendo más caros de producir, especialmente para las marcas independientes o más pequeñas que no se benefician de las economías de escala. Al mismo tiempo, corporaciones más grandes Las empresas que entraron en el mercado vegano por cuota de mercado en lugar de por una misión están retrocediendo a medida que el crecimiento se ralentiza, lo que desestabiliza aún más la confianza en la categoría.
Como resultado, incluso las empresas que desde hace tiempo se comprometen con los principios veganos —desde tiendas de comestibles locales hasta restaurantes especializados— tienen dificultades para hacer frente a la inflación, el aumento de los costes de los proveedores y un panorama comercial en constante cambio. En el sector de la hostelería, algunos restaurantes que en su día se enorgullecieron de ofrecer una alimentación totalmente vegana han vuelto discretamente a menús mixtos. No porque hayan dejado de creer en el mensaje, sino porque las cuentas no cuadraban.
Para nosotros, esto convierte el Mes Mundial del Veganismo no en un momento de celebración en el sentido tradicional, sino en un momento de claridad y de renovación del compromiso.
El veganismo nunca ha tenido que ver con la perfección, el rendimiento ni la popularidad. En esencia, es una filosofía basada en la reducción de daños, la sostenibilidad y la compasión. No es una cuestión de blanco o negro, sino una dirección: un esfuerzo consciente por tomar decisiones que se alineen con nuestra ética y nuestro bienestar a largo plazo. Eso no ha cambiado. De hecho, los argumentos ambientales se han fortalecido. Según Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y recientes Según los informes climáticos de 2025 , la reducción de la ganadería sigue siendo una de las formas más eficaces en que las personas pueden reducir su huella de carbono. Programa Oxford Martin sobre el Futuro de la Alimentación Continúa respaldando las conclusiones de que las dietas basadas en plantas ofrecen reducciones significativas en las emisiones de gases de efecto invernadero, el uso de la tierra y el consumo de agua en comparación con las dietas ricas en productos animales.
Así que no, el veganismo no está muerto. Sin embargo, necesita protección, apoyo y un nuevo enfoque.
En Vegaliano , siempre hemos creído que Las culturas tradicionales y los valores basados en plantas pueden coexistir armoniosamente . Nuestra misión nunca ha sido borrar lo familiar, sino reinventarlo. El aroma de la passata fresca cocinándose a fuego lento. Una porción de tiramisú compartida al final de una larga comida. El ritual del aperitivo: una tabla de quesos, un spritz y buena compañía. No son cosas a las que debamos renunciar. Son cosas que podemos recuperar, de una manera más amable.
Pero no podemos hacerlo solos. Este mes nos recuerda que, si queremos un futuro donde los negocios de productos de origen vegetal prosperen, necesitamos el apoyo de la comunidad; no solo con clics o «me gusta», sino con decisiones de consumo conscientes. Comprar a productores veganos independientes, dejar una reseña, recomendar una marca a un amigo, visitar un mercado o mercadillo local: estas pequeñas acciones mantienen vivos los ecosistemas.
Este también es un momento crucial para que empresas como la nuestra sean transparentes. Nosotros también sentimos la presión del aumento de los costos de producción, la logística compleja y un mercado que no siempre está preparado para modelos de crecimiento lento. Pero seguimos aquí, porque creemos que esto importa. Porque cada despensa de productos vegetales que abastecemos, cada alternativa de queso vegano que enviamos, cada colaboración que impulsamos: todo cuenta.
El Mes Mundial del Veganismo no es solo para quienes ya son veganos. Es para quienes sienten curiosidad, quienes están en transición, quienes son flexitarianos y quienes apoyan el veganismo. Es para cualquiera que crea que la comida puede —y debe— ser mejor.
Así que, independientemente del punto en el que te encuentres en este camino, te invitamos a reflexionar con nosotros. A cocinar con más calma. A comprar con mayor consciencia. A recordar por qué comenzó este movimiento e imaginar en qué se puede convertir.
En un mundo donde todo parece temporal, elegir el veganismo sigue siendo una de las decisiones más sensatas y con visión de futuro que podemos tomar.
Gracias por su estancia con nosotros.